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El expresidente uruguayo José Mujica alabó este lunes el «buen camino» emprendido por la Iglesia católica para facilitar el diálogo en curso entre el Gobierno del presidente Nicolás Maduro y la Mesa de la Unidad Democrática (MUD).

Igualmente lamentó que haya «una crispación, una incapacidad somática como para poder dialogar de buena fe», pero aseguró que no ve «otra salida» que un entendimiento final entre el Gobierno y la oposición. Por otra parte, Mujica se mostró solidario con el dirigente opositor, Leopoldo López, que acaba de cumplir 1.000 días en prisión.

«No me gustan los presos políticos en ninguna parte del mundo (…)  tengo solidaridad de preso con todos los presos políticos del mundo, cualquiera sea la causa».  Asimismo, El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, escribió un artículo de opinión en el que afirmó que cada preso político en Venezuela le ha dolido y señaló que un nombre como el de Leopoldo López podría «representarlos a todos». AGENCIAS