Desde hace varios meses en la zona norte de Anzoátegui, era frecuente ver el cartel en panaderías que decía «no hay pan por falta de harina». Aún hoy hay locales que lo exhiben pese a que la venta de este producto se ha ido «normalizando».
También se ven colas en algunos establecimientos, que duran cierto tiempo, dependiendo de las unidades que tengan para despachar a los comensales. Muchos clientes se forman rápido porque el pan «se acaba a velocidad de vértigo».
Pero además de esto, se ha visto en las calles en los últimos meses cómo ha proliferado la venta de pan artesanal.
En muchas esquinas o puntos de la zona norte se puede ver a vendedores con panes en bolsas, normalmente dos piezas. El precio varía en muchos lugares, pero va entre los Bs. 600 a Bs. 800 por unidad. Eso depende de lo que les dicten donde los preparan.

Ventas
La señora María Calderón suele ubicarse en la entrada de Pozuelos, en Puerto La Cruz, donde vende las canillas a Bs. 700, cada una.
Dijo que no lleva mucho tiempo en el negocio, pero que suele vender bien en algunos días.
Comentó que esto se hornea en un lugar y luego los despachan para su venta informal en las calles de la ciudad porteña.
Otra vendedora es Kamila Amaya, quien dijo que por día, llega a vender hasta 100 panes, lo que para ella representa el total de lo que le dan para poner a la venta.
También está ubicada en Pozuelos y destacó que por cada unidad vendida, a ella le corresponden Bs. 50.
Si tomamos esa cifra, asumiendo que venderá todas las piezas del producto, Amaya puede hacer por día Bs. 5 mil.
Otro joven mencionó que le dan 70 panes para vender y gana por pieza lo mismo que Amaya.

Harina
Amaya relató que para conseguir la harina «se sufre bastante».
«Un saco de la 50 especial cuesta Bs. 200 mil, al menos. Cada vez sale más cara obtenerla, y por ello estos panes suelen ir subiendo de precio», mencionó.
La vendedora expuso que la harina que compran no es la que el gobierno nacional prometió traer desde Rusia para paliar la escasez de este rubro a nivel nacional.