El británico Lewis Hamilton (Mercedes), demostró que está a punto para competir, al ser el más rápido en las dos primeras sesiones libres del Gran Premio de Australia, primera prueba del Mundial 2017 de Fórmula 1.
Con 1 minuto, 23 segundos y 620 milésimas, registro logrado con neumáticos superblandos bajo el sol y temperaturas clementes -unos 20 grados-, el tres veces campeón del mundo demostró que este año está dispuesto a recuperar el trono.
Detrás del británico pocas sorpresas, con el alemán Sebastian Vettel (Ferrari) en segunda posición por delante del otro Mercedes, en el que debutó el finlandés Valteri Bottas.
El otro Ferrari, del también finlandés Kimi Räikkönnen, y los Red Bull de Daniel Ricciardo y Max Verstappen completaron un previsible Top 6.
AFP