Columnas a medio construir, cabillas oxidadas y paredes a punto de caer, es lo que se observa en cada una de las obras públicas abandonadas, ubicadas en el municipio Juan Antonio Sotillo.
Algunas de ellas, como la que se encuentra al lado del Mercado de los Cocos, donde venden pescado, hoy solo se ve representada por unas cuantas vigas, las cuales formarían parte de lo que prometía ser un mercado para beneficiar a toda la comunidad, pero no se ha completado desde hace más de cinco años.
Otra de ellas es la de la iglesia que se encuentra detrás de la alcaldía de dicha jurisdicción, en donde se puede ver una gran estructura de metal y concreto, la cual buscaba ser la nueva sede de la casa parroquial Virgen de Fátima, pero se quedó a medias.
«Tenemos años viendo eso y ya hasta le creció maleza en todo el terreno, pero lo peor es que los indigentes se meten ahí y hacen desastres», señaló el vecino Diomedes Figuera, quien además comentó que había sido víctima de la delincuencia por la misma zona.
La misma situación ocurre por un edificio incompleto, justo al lado de Puertoteatro. Dicha información fue suministrada por el habitante de alguna residencia cercana, Jorge Pinto, quien acotó que los malos olores del sitio se perciben desde lejos, ya que según su testimonio, quienes han tomado el sitio de hogar hacen sus necesidades fisiológicas por donde sea.
Por otro lado, se encuentra el terreno tomado por el Gobierno central en el hoy modificado Terminal de Ferrys Eulalia Buróz, el cual solo consta de algunos toldos al fondo del área de embarcación.
La usuaria Celeste Villamizar indicó que lamenta que las instalaciones del terminal naviero se encuentren en estas condiciones, ya que anteriormente contaba con aire acondicionado, cafetín, sala de espera y buena infraestructura.
Respuesta
Meses anteriores la concejal de Seguridad Ciudadana en la Cámara Municipal de Sotillo, Dubraska Pérez dijo que esperaban recursos para recuperar estas obras.
