La Reina Isabel II celebra este viernes su 91 cumpleaños como la soberana que más tiempo ha reinado dentro de la monarquía británica, por encima de Victoria I del Reino Unido, la cual gobernó durante 64 largos años. Sin embargo, Isabel II ha decidido dar un paso atrás e irse apartando cada vez más para que las generaciones más jóvenes de la familia real adquieran protagonismo en los numerosos actos públicos y compromisos oficiales.

Casada por amor desde hace 69 años con Felipe de Edimburgo, que el próximo mes de junio alcanzará los 96 años. El saludo de armas desde el puente de la Torre de Londres marcará, durante la jornada de hoy, el cumpleaños de su reina más longeva.

Mil faros se encendieron por todo el país el festejo del año pasado, día en el que sucedieron múltiples eventos y festejos en honor a su soberana, entre los que destacó un magnífico desfile por la ciudad de Londres hasta llegar a su casa en el castillo de Windsor, su favorita entre las tantas residencias reales.

Algo que, como mínimo, se igualará este año.

La reina, poco dada a salirse del protocolo, bromeó el pasado mes de junio tras reunirse con el viceministro principal de Irlanda del Norte, Martín McGuiness. Las cámaras captaron el momento en el que ambos se encontraban, y con ello, un breve intercambio de saludos iniciales. “¿Está bien?”, le preguntaba McGuiness, a lo que su majestad respondió sonriente “todavía estoy viva”.

La monarca más popular del mundo comenzó a entregar tareas y compromisos a otros miembros de la realeza, incluyendo los campeonatos de tenis de Wimbledon. Mientras que su hijo mayor, el príncipe Carlos, es el heredero al trono, el foco mediático y la atención pública se centra principalmente en su dos nietos, Guillermo y Enrique, los cuales han asumido, desde hace unos años, algunos de los deberes de la familia real.

Con la llegada de dos bisnietos, fruto de la relación entre Guillermo y su esposa Kate Middleton, el príncipe George y la princesa Charlotte, se ha incrementado la visión positiva en el país de la familia real inglesa. Por su parte, el príncipe Enrique también es muy admirado, recibiendo cientos de elogios tras reconocer esta semana haber vivido en el “caos» total” en el aniversario número 20 de la muerte de su madre, Lady Diana.

Y confesar que había visitado en más de una ocasión a un psiquiatra para poder superar el trance.

 

Agencias.