El Real Madrid busca acertar hoy, en el Clásico en el Santiago Bernabéu, un golpe definitivo a LaLiga Santander ante el FC Barcelona, que espera dejar atrás la decepción de la eliminación en la Liga de Campeones y seguir vivo en un campeonato en el que se encuentra a tres puntos del conjunto blanco, todo ello sin el sancionado Neymar.

A falta de seis partidos para la resolución del campeonato, la tensión todavía se mantiene entre blancos y azulgranas. El conjunto de Zinédine Zidane, líder con 75 puntos -y un partido menos-, maneja tres de ventaja sobre los de Luis Enrique.

La eliminación en cuartos de final de la ‘Champions’ ante la Juventus ha puesto fin a una de las aspiraciones de la temporada.

En cambio, los madridistas pasaron apuros pero solventaron su serie ante el Bayern de Múnich.

Diferentes focos

Aún así, los de Zidane pueden permitirse malgastar un bala, no así el cuadro catalán, que, como expresó el propio Luis Enrique en rueda de prensa, se enfrenta a una «final». «Es una jornada decisiva, va a ser un Clásico de los que pueden sentenciar LaLiga o dejarla muy abierta. Para nosotros sí que significa una final», indicó.

Mientras, el preparador francés huye de favoritismos y trata de desprender de presión a sus hombres, a los que deberá dosificar en las próximas semanas para llegar en perfectas condiciones a los exámenes finales. Todo ello en su primer Clásico en el coliseo blanco.

Y es que ‘Zizou’ todavía no ha dirigido un partido ante el eterno rival en su estadio; de hecho, la última visita de los de Luis Enrique al Bernabéu (0-4), el 21 de noviembre de 2015, comenzó a cavar la tumba deportiva de Rafa Benítez, que en enero era destituido para dar paso al galo.

 

Agencias.