La Juventus busca confirmar su presencia en la final de la Liga de Campeones, que ve cercana tras el favorable 0-2 de la ida, mientras que el Mónaco confía en el joven Kylian Mbappé para una remontada histórica.

El doblete del argentino Gonzalo Higuaín en tierras galas, hace apenas siete días, da todo el favoritismo a los italianos, que además contará con el apoyo de su afición que llenará el estadio en busca de ver como su equipo se planta en una final en la que ya estuvo en 2015, cuando la perdió ante el Barcelona.

Vieja pared
En el Mónaco, la esperanza para una remontada que sería histórica para el club tiene un nombre propio: su joya Mbappé, de 18 años y que en la ida se encontró con el muro Gianluigi Buffon. Pero la historia europea es favorable al club turinés, que nunca desaprovechó una victoria fuera de casa en la ida de una eliminatoria.

Tras el resultado de la ida, las estadísticas sonríen a un Juventus que lleva una racha abierta de seis partidos europeos consecutivos sin recibir goles, lo que supone el quinto mejor registro de la historia de la competición (621 minutos).

Además, los «bianconeri» sellaron el pase de ronda once veces en once intentos contra equipos franceses, y siempre eliminaron al Mónaco en las dos eliminatorias precedente: en los cursos 1997-98 (semifinal) y 2014-15 (cuartos de final). El técnico Massimiliano Allegri reservó a seis de sus titulares habituales en el último partido liguero, empatado contra el Torino (1-1), y alineará en el Juventus Stadium a su mejor once para completar el trabajo realizado en el estadio Louis II de Mónaco. Aunque no ha marcado en los dos últimos partidos, Mbappé, de 18 años, acumula 18 tantos en sus últimos 20 choques.

Sólidos en casa
En los últimos 55 partidos disputados, el Juventus solo concedió dos goles en casa: ante el Bayern Múnich, en los octavos de final del curso pasado; y ante el Atalanta, en la Copa Italia, en una victoria por 3-2 del pasado enero.