Recostado en el muro de su hotel en Hollywood, Julio Briceño esperaba a José Rafael “Catire” Torres, su compañero en la banda venezolana Los Amigos Invisibles, que en unas horas actuaría en Los Ángeles. Pero había tiempo para un café.

El grupo está promocionando en varias ciudades de Estados Unidos y México su nuevo disco “El Paradise”, el primero después de la salida de dos de sus fundadores pero que curiosamente es una vuelta a sus raíces.

“Sabíamos que eso inevitablemente nos iba a pasar a alguno de nosotros. Habíamos durado 24 años juntos y era un milagro que una banda no solo latina sino del mundo dure tanto con los mismos integrantes”, explicó el vocalista Briceño. Y con el adiós de José Luis Pardo, “Cheo”, y el tecladista Armando Figueredo surgió una pregunta con ritmo de un conocido merengue. “Tuvimos que preguntarnos cada uno: ¿Seguimos? ¡Sí! ¿Paramos? ¡No! Y estuvimos unos tres días casi disueltos pensando qué queríamos hacer”, recordó el cantante.

En ese momento el “acústico” estaba grabado, faltaba edición, y una gira por Europa estaba confirmada. “Había que hacerla” y fue así como las ruedas de Los Amigos comenzaron a andar de nuevo.
Habían tres opciones, señaló Briceño: “O hacemos canciones nuevas, o nos quedamos girando con nuestros grandes éxitos o nos disolvemos”. La opción uno ganó.

Inspirados
Entraron a un estudio y con los micrófonos abiertos comenzaron a lanzar ideas. El disco “salió de ‘jammings’ copiando la fórmula de ‘Some Kind Of Monster’ de Metallica… Con las ideas que nos gustaron en el momento, las trabajamos dos horas y de ron en ron” salió el disco, recordó Briceño.
“El Paradise” está cargado de esos sonidos groovy y bailables que caracterizan al grupo, con letras cargadas de sexualidad y muchos venezolanismos.

Su nación
“La situación en Venezuela está muy difícil”, dijo Briceño al comenzar el pequeño toque en Amoeba. Ambos llevan una pulsera de hilo con el amarillo, azul y rojo de la bandera de su país, que atraviesa un momento de mucha tensión con manifestaciones callejeras que ya más de 50 muertos.