En el municipio de Ocaña, ubicado al Norte del Departamento de Santander, en Colombia, alrededor de 500 mujeres ejercen la prostitución, según datos oficiales preliminares el 90% de ellas es procedente de Venezuela.

Durante la última semana han sido varias las quejas por parte de los residentes en la localidad en torno a esta situación, a raíz de ellos las autoridades se han dado a la tarea de inspeccionar los prostíbulos cercanos a la plaza de mercado.

La coordinación de Salud Pública, adscrita a la Secretaría de Desarrollo Humano de la región efectúa operaciones de control y verifican las condiciones de los establecimientos que ofrecen este tipo de servicios para constatar si cumplen con normativas sanitarias establecidas en la ley.

Holger Santos, secretario de Desarrollo Humano, indicó que realizan los controles con el objetivo de garantizar la erradicación del trabajo informal y evitar la propagación de enfermedades de transmisión sexual.

A pesar de ser una población flotante, datos oficiales aseguran que en su mayoría estas mujeres no cuentan con el estatus legal para trabajar en territorio colombiano.