Una pequeña niña llamada Grace oriunda de la ciudad Michigan, EE.UU., logró arribar a su octavo mes de vida, luego que nació pesando a penas medio kilo, y con 23 semanas de gestación, su aspecto que redujo sus expectativas de vida, sin embargo el tiempo ha transcurrido y la historia ha sido contraria a lo que se presagiaba.

Su madre Mary Parkins compartió una impactante foto a través de la red social Instagram de los dos momentos de la bebé, en la que para muchos puede tildarse de milagro en vista que la infante vivió sus primeros 144 días en una incubadora.

Actualmente la pequeña se regocija en los brazos de su madre, y se ve feliz con un gran semblante.