Al menos 18 muertos y más de 40 heridos es la última cifra hecha pública por las autoridades locales tras el ataque de este miércoles en el instituto politécnico de la ciudad de Kerch, en la península de Crimea.

El cuerpo del sospechoso ha sido encontrado en el interior del centro educativo, según ha informado el Comité Nacional Antiterrorista de Rusia. Se trata de un antiguo alumno del instituto que se suicidó posteriormente, según ha declarado el líder crimeo, Serguéi Aksionov, a la cadena Rossiya 24. El atacante tenía 22 años.

El Comité ha abierto una investigación por «ataque terrorista» tras la explosión en la que, según los últimos datos, han perdido la vida al menos 18 personas, entre alumnos y educadores.

«Se ha incoado una causa penal por ataque terrorista», ha declarado a la prensa la portavoz del organismo, Svetlana Petrenko. La funcionaria ha asegurado que la mayoría de las víctimas del atentado son adolescentes.

La explosión, según ha informado el Kremlin, ha podido ser consecuencia de un atentado. «Esta hipótesis se está estudiando», ha confirmado el portavoz del gobierno ruso, Dmitri Peskov, a los medios de su país. Minutos antes, el Comité Nacional Antiterrorisa de Rusia ha atribuido la explosión a la detonación de un «artefacto explosivo».

Al parecer, algunos testigos han escucharon ráfagas de fusil después de la explosión.