Este lunes, la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio (Fedecámaras) del Zulia se declaró en emergencia, debido a la paralización del 75% de la actividad productiva del estado tras los recurrentes apagones que se ha extendido en la región desde el 7 marzo.

El vicepresidente de Fedecámaras Zulia, Ricardo Acosta, agregó que se han perdido 2.000 empleos y otros 8.000 están en riesgo.

A través de un comunicado, se dio a conocer que en ciertas zonas no hay luz eléctrica hasta «12 horas continuas, y en algunos municipios (durante) más de 18 horas».

Además se hizo un llamado a los encargados del Servicio Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat) para que estudia la posibilidad de «exonerar al sector privado del pago de impuesto y del cumplimiento de deberes formarles» para no dejar «un cementerio de empresas».

«Estamos en un estado de parálisis. Llegó al colapso nuestra región», señaló Acosta, quien instó a las autoridades del Zulia a establecer «un cronograma (de racionamiento) serio y creíble», en pro de poder planificar las actividades comerciales, productivas e industriales.