Este miércoles fue presentado el diseño de la nueva piscina retadora a la muerte con 700 pies de altura, en el edificio West Sussex de Londres qué contará con su propio ascensor.

De acuerdo con arquitectos de Londres su nuevo objetivo es crear arquitectura que tenga como referencia la muerte.

La piscina cuenta con cuatro lados acrílicos y piso transparentes dando la imagen de no tener bordes, Además de tener el objetivo de que las personas que estén en planta baja vean a las que están nadando en el techo.

Los huéspedes podrán acceder a ella a través de un ascensor especial que va directo y únicamente para la piscina. Según los dueños del edificio el proyecto tendrá como nombre “Infinity London”

 

 

El diseñador y director técnico de piscinas de Compass Pools, Alex Kemsley, dijo: Colóquese las gafas y con una vista de 360 grados de Londres a partir de 220 m, realmente será otra cosa, pero definitivamente no es una experiencia para los acrofóbicos.

La construcción en Infinity London podría comenzar el próximo año si todos los socios y contratistas están confirmados.