El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, tildó de «inaceptable» cualquier intento de influir en un proceso electoral nacional desde el exterior, preguntado por la supuesta injerencia de Rusia en las presidenciales de Estados Unidos mediante ciberataques.

Las declaraciones las ofrece un día después de que el presidente electo estadounidense, Donald Trump, admitiera que Rusia fue responsable del pirateo informático a los demócratas durante la campaña.

Situación que pone en alerta a la organización, la cual nota con preocupación la puesta en evidencia de «informes sobre ciberataques contra muchos aliados», lamentó junto al primer ministro de Nueva Zelanda, Bill English.

 

EFE