Seis muertos y más de 1.500 detenidos ha dejado las protestas por el aumento del precio de la gasolina y el diésel decretado por el Gobierno federal, que entró en vigor el 1 de enero.

Hasta ahora la mayor protesta se ha registrado en Monterrey, capital del norteño estado de Nuevo León, donde los disturbios y saqueos a comercios registrados el jueves por la noche y la madrugada del viernes dejaron 182 detenidos, 15 lesionados y 27 comercios saqueados, informaron las autoridades.

«El aumento de la gasolina ha impactado y provocado un gran descontento», afirmó el gobernador Jaime Rodríguez Calderón.

No obstante, aseguró que no permitirá más vandalismo ni más saqueos a comercios. «Y todos aquellos que participaron en los saqueos van a ser perseguidos», enfatizó.

La tarde del jueves fueron convocadas al menos seis marchas en la zona metropolitana de Monterrey para protestar contra el aumento de precios de entre 14 % y 20 % a las gasolinas y el diésel decretado por el Gobierno federal y que entró en vigor el 1 de enero.

Las marchas convergieron al caer la tarde frente al Palacio de Gobierno, congregando a más de 10.000 ciudadanos. Un grupo de jóvenes intentó entrar a la sede del poder estatal y agentes de la policía lo impidieron.

Ello provocó que los manifestantes lanzaran piedras y otros objetos al edificio, rompiendo seis grandes vitrales con figuras de héroes nacionales que datan de inicios del siglo XX. Posteriormente se presentaron choques entre manifestantes y policías.

Globovisión