La situación política, social y económica que atraviesa Venezuela, sigue dándole dolores de cabeza a los equipos de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional (LVBP). Sumado a las divisas, ahora llegan las trabas que pondrán los equipos de las Grandes Ligas para enviar a sus jugadores al país.
Luis Amaro y Carlos Miguel Oropeza, gerentes deportivos de Águilas del Zulia y Cardenales de Lara respectivamente, hablaron de las complicaciones que tendrán para conseguir importados de renombre y prospectos de alto nivel para la próxima temporada.
“Varias organizaciones nos han dicho que no tienen nada en contra del país, pero que si llegan propuestas de otros países del Caribe la primera opción sería mandarlo a esa otra liga y no a Venezuela”, comentó Oropeza, que modificó su estrategia para encontrar jugadores extranjeros.
“Hay que buscar jugadores más veteranos y que no tengan tantos inconvenientes en venir a Venezuela”, aseguró el gerente de Lara. “Hay que atacar otros mercados para encontrar jugadores que llenen los cupos de importados”.
Por ese motivo, peloteros provenientes de ligas europeas, experimentados de torneos independientes y latinos que se quedaron sin trabajo en el Caribe, aumentarán su popularidad en los clubes de la LVBP.

Cierran la puerta
Los Bravos de Atlanta ya expresaron que no aceptarán ninguna propuesta de negociación que venga desde Venezuela.
“Hasta ahora, la única organización de MLB que nos ha dicho que no enviarán peloteros a Venezuela son los Bravos», señaló Amaro, que ya empieza a descartar la presencia de jugadores como Ender Inciarte.
La delicada situación social que está viviendo el país, han aumentado el recelo de los equipos de Grandes Ligas para permitir la negociaciones con sus peloteros.
Todo esto genera más expectativas por el nivel que mostrará la zafra 2017-2018. Con los inconvenientes económicos que ya tienen los equipo, sumado a las dificultades para traer jugadores, todo indica que la calidad está del juego estará en descenso.