Corea del Sur aprendió la lección de su primer extrainning del Clásico Mundial de Béisbol (CMB) frente a Israel, al derrotar 11-9 a Taiwán, en 10 entradas. Ambos conjuntos marchaban con marca adversa de 0-2 antes de comenzar el encuentro, y lo que deseaban era conquistar el triunfo de la honra, porque matemáticamente estaban eliminados tras caer ante Israel y Holanda en sus compromisos previos.  Un cuadrangular de dos anotaciones de Taekyun Kim definió el encuentro con que las selecciones asiáticas se despidieron de la competición.