El sueño que zarpó el 14 de noviembre en Port Moresby, con las intenciones de hacer una destacada actuación en el Mundial sub-20, pudiese hundirse temprano para las guerreras. La tropa de José Catoya está en la obligación de golear hoy a México, y esperar que Alemania también apabulle a Corea del Sur, si quieren pasar a cuartos de final.
La poca efectividad en ataque y los problemas por las bandas han condenado a las vinotinto a realizar una épica para sacar su boleto. Seis tantos en contra y uno solo a favor son estadísticas lapidarias que hablan del poco funcionamiento que ha tenido Venezuela, en su primera participación en un Mundial sub-20.
Baja notable
Para colmo de males, las criollas no contarán con Yenifer Giménez por acumulación de amarillas. “Calcibón”, como se le conoce a la jugadora de Lara, portó la cinta de capitana en los primeros dos choques. Su lugar como contención lo tomaría Hilaris Villasana.
Mientras que la otra duda en el once que utilizará Catoya para buscar la hazaña radica en el lateral derecho. Ni Gerardine Olivo, que salió con molestias del choque ante las asiáticas, ni Michelle Romero -quien ingresó de cambio y salió a los 16 minutos ante Corea- han podido tapar las escaladas rivales por ese andarivel.
Las dos únicas que han brillado en estos dos compromisos son la portera Franyely Rodríguez y la atacante Marianas Speckmaier. Las atajadas de Rodríguez han evitado resultados más abultados. Un cero ante México será un requisito imprescindible si se quiere obrar el milagro. Mientras que la “Gringa” ha mostrado ser desequilibrante, pero necesitará más efectividad, porque toda pasa por llenarle el saco de goles a las de Concacaf.
