Para la actriz australiana Nicole Kidman tener este año cuatro películas en el Festival de Cine de Cannes fue una coincidencia inesperada, pero al mismo tiempo es resultado de su intención de “mantenerse audaz y abierta” a los desafíos.

Así lo señaló este lunes la conocida actriz que dijo que su pasión por actuar sigue siendo fuerte y que está en un momento de su vida donde “pretendo que todavía tengo 21 y estoy empezando mi carrera”.

Dos de sus películas ya debutaron en Cannes, incluyendo «The Killing of a Sacred Deer», la comedia oscura de Yorgos Lanthimos.

Al igual que otros trabajos del director griego («The Lobster» »Dogtooth»), la reacción en el festival francés se dividió sobre el filme que da un vistazo a los errores del pasado que acosan a la familia de un cirujano interpretado por Colin Farrell.

Kidman opina que «The Killing of a Sacred Deer» y sus otras películas en Cannes reflejan su continuo “espíritu rebelde”.