«¡Cuidado con mis tacones!”, se le escucha decir a Majella cuando llega a casa. Su porte elegante, poses dulces frente a la cámara y sonrisas ante el flash sorprenden a quienes observan a esta pequeña artista, que con apenas seis años ya escogió su futuro: Quiere ser modelo de revista.

Dos años en el mundo del modelaje solo ha pulido atributos que desde muy pequeña demostraba poseer. “Siempre notamos que le gustaba posar delante de la cámara, le encantaba ver revistas y modelos, decía que quería pertenecer a ese mundo. Yo fui modelo muy joven y cuando me comentó lo que quería no lo dudé, la inscribí en una academia para que aprendiera lo necesario, en aquel entonces tenía apenas cuatro años de edad”, relató su mamá, Thamesis Brito de Molina.

Fotos que enamoran
Para Majella el modelaje es más que un estudio, se entrega por completo a este arte desde que llega a la academia diciéndoles a los papás “que la dejen ahí, que no se preocupen”.

“Es impresionante verla actuar. Puede notarse tímida en un determinado momento, pero cuando ve una cámara se transforma, automáticamente posa ante el lente y se ve que lo disfruta. Incluso ella misma me ha explicado cómo usar una cámara y cuáles son las poses más correctas que se pueden hacer. Además, disfruta enseñarle a su hermana Leticia, de cuatro años, qué poses puede hacer cuando vaya a tomarse una foto”, narró su papá, Richard Molina.

Más que pasarela
Majella forma parte de las estudiantes de la Academia Mille Models en Lechería desde hace dos años. Allí aprende no solamente modelaje, sino también baile, foto- pose, protocolo, oratoria, entre otras especialidades. Ha modelado en varios eventos de la academia a nivel regional, pero califica que lo que más le gusta es la pasarela y posar diseños reconocidos de la zona, pero aún no ha mostrado afición por los certámenes de belleza.

-¿La imaginan en algún Miss?
Creo que eso es algo que dirá el tiempo, mientras tanto disfrutamos viéndola posar y todo lo que ha aprendido nos llena de orgullo. Es increíble como una personita tan pequeña puede hacer tantas cosas al mismo tiempo, como puede desarrollar tantas aptitudes y de forma tan perfecta, explicó Molina.

-¿Creen que nació con ese talento?
Sí, el talento se lleva en la sangre. Yo creo que ese talento es innato, cada persona nace con una cualidad y ella demostró que le gustan las pasarelas desde corta edad. Por eso siempre tratamos de que logre distribuir sus actividades de forma que sea feliz con lo que está haciendo y al mismo tiempo le dé chance de ir a la escuela sin inconvenientes”, relató su mamá, agregando que ahora es que le sobra camino a la pequeña estrella de la familia.

Datos especiales
La pequeña nació en Lechería, estado Anzoátegui y desde muy pequeña mostró gusto por las pasarelas. Además de eso, le encanta bailar y adora comer pizza, ya que dice que es su comida preferida.

Freya Farcheg