El toronjil es una planta medicinal muy conocida por sus componentes calmantes, siendo una excelente opción para tratar problemas relacionados con los nervios.

La planta contiene abundantes aceites esenciales que desprenden un olor similar al limón, además funciona como analgésico natural debido que puede calmar dolores producidos por la migraña, contracciones musculares y malestares estomacales por su alto contenido en eugenol, una sustancia que dificulta la transmisión de la señal nerviosa del dolor a diferentes zonas del cuerpo.

Para el insomnio, ha demostrado ser una solución efectiva hasta en los casos más crónicos debido a que el toronjil reduce la actividad cerebral y permite al cuerpo una mayor relajación, necesaria para el sueño.

¿Cómo hacer un té de toronjil?

Su preparación es rápida y sencilla, donde sólo se necesita: 1 litro de agua, 1 taza de hojas de toronjil y una cucharada de miel (opcional).

Primeramente es necesario hervir el litro de agua en una olla a fuego alto, luego añadir las hojas de toronjil y dejar hervir durante 5 minutos, seguido de ello se debe retirar la olla, colar y dejar reposar por 10 minutos. Tras esos sencillos pasos estará lista para ser consumida.

Lo ideal es que la infusión sea tomada todas las noches horas antes de ir a dormir.