Miles de cubanos desfilaron en silencio este lunes por la Plaza de la Revolución, la tribuna que más amó Fidel Castro, para rendir el primer homenaje al histórico líder de la isla cuyas cenizas no han sido exhibidas.

La peregrinación al corazón político de La Habana donde Castro sedujo a multitudes con sus maratónicos discursos, y no pocas veces retó a Estados Unidos, abrió una semana de tributo al padre de la Revolución que falleció el viernes a los 90 años de edad. Los cubanos ingresaban uno a uno al memorial José Martí, donde se levanta un sobrio altar de flores con la imagen de un Fidel de barba negra, erguido, con morral de guerrillero.

Los cubanos esperaban poder rendir tributo a las cenizas del hombre que gobernó sin concesiones durante 48 años, antes de que una enfermedad lo obligara a ceder el poder en 2006 a su hermano Raúl Castro.  Pero el Gobierno, que mantiene en reserva los detalles de la muerte de Fidel Castro, no exhibió los restos, como había sugerido.

El homenaje en la Plaza de la Revolución se extenderá hasta hoy martes. Mañana iniciará una procesión que recorrerá 13 de las 15 provincias, y que concluirá el domingo en Santiago de Cuba, donde se espera sean depositadas las cenizas en el cementerio Santa Ifigenia tras un recorrido de unos mil kilómetros.

Presentes
Entre los pocos nombres confirmados hasta ahora para participar en los homenajes está el del rey emérito de España, Juan Carlos I. Los presidentes de países aliados de Cuba, como los de Venezuela, Nicolás Maduro; Bolivia, Evo Morales; Nicaragua, Daniel Ortega; y Ecuador, Rafael Correa. Tampoco se descartó la asistencia de exmandatarios como el brasileño Luiz Inacio «Lula» da Silva, la argentina Cristina Fernández o el uruguayo José «Pepe» Mujica.

Recorrido
El miércoles 30 de noviembre las cenizas de Fidel Castro comenzarán un periplo por la isla para que todos los cubanos le den su último adiós, al presidente líder de la isla caribeña.