La poderosa líder opositora peruana Keiko Fujimori fue detenida este miércoles apenas un juez dictó una orden de prisión preventiva en su contra por 36 meses, acusada de recibir aportes ilegales de campaña de la brasileña Odebrecht.

El juez Richard Concepción Carhuancho dictó orden de detención inmediata contra Keiko, de 43 años, quien abrazó en el tribunal a su marido, Mark Vito Villanella, a quien le corrían las lágrimas, antes de irse detenida conducida por varios agentes de policía.

«La única medida necesaria en su caso es indudablemente la prisión preventiva», dijo el magistrado.

El juez indicó que la evidencia de la fiscalía demostraba que Keiko dirigía una «organización criminal de facto que se ha enquistado dentro del partido» fujimorista, que blanqueaba dinero de origen ilícito, y que la investigada tiene un «alto peligro de fuga».