La Corte de Apelaciones del estado de Salto del Guairá (Paraguay) confirmó ayer la condena contra 11 personas acusadas de participar en la masacre de Curuguaty de 2012, en la que murieron 17 personas y por la que fue destituido el expresidente Fernando Lugo. El tribunal admitió el recurso de apelación presentado por los acusados, pero no dio lugar debido a que la sentencia dictada en 2016 «se confirma en todas sus partes». En la sentencia se condena a cuatro campesinos a entre 18 y 30 años de prisión, quienes permanecen en la cárcel de Tacumbú, y a tres mujeres a seis años, a quienes se les mantiene el arresto domiciliario. El resto de los acusados fueron liberados en 2016, ya que su sentencia estableció cuatro años de prisión cumplidos durante el juicio.

 

EFE