Ayer a las 4:00 pm, un adolescente de 17 años fue declarado muerto en el hospital Luis Razetti de Barcelona.

El joven, quien padecía una condición anémica desde que nació, murió debido a que no encontró los fármacos para tratar ese mal.

Su padre, un conductor de 65 años de edad, dijo que desde el miércoles, había recorrido varios hospitales de la zona norte del estado, para tratarlo, pero no tuvo nigún resultado.

El hombre dijo entre lágrimas que el menor de sus tres hijos no pudo recibir atención médica porque le faltaron unas soluciones que no pudo conseguir a tiempo.  Había obtenido otras inyecciones, pero no fue suficiente.