Un comerciante fue asesinado cuando intentó impedir un asalto que se registraba en la tienda Kioto Sport del Centro Comercial San Remo Mall, situado en la avenida Jesús Subero de la ciudad de El Tigre.
Todo ocurrió aproximadamente a las 4:30 de la tarde de este miércoles cuando dos antisociales ingresaron al referido comercio y anunciaron el atraco. Según testigos, Edgard Cañizalez García, de 52 años de edad, salió de la tienda corriendo para notificar a los efectivos de seguridad el hecho delictivo.
“Están atracando”, fueron las palabras que expresó Cañizalez mientras intentaba sacar un arma de fuego. Los hampones al percatarse de la situación salieron de la tienda y le dispararon. Cañizalez enfrentó a los maleantes logrando herir a uno de ellos, sin embargo, en la parte de afuera aguardaban otros dos antisociales y también le dispararon.
En medio del tiroteo el hombre recibió un impacto de bala y cayó al suelo, seguidamente uno de los delincuentes se acercó y lo remató para luego despojarlo del arma de fuego. Los antisociales huyeron a bordo de una camioneta Chevrolet Captiva que algunos dijeron era de color dorado y otros describieron como gris. Supuestamente los maleantes usaron armas con selectores.
Abatido
Oficiales del Centro de Coordinación Policial de El Tigre ultimaron a un presunto asaltante durante un supuesto enfrentamiento, sin embargo, testigos del hecho lo calificaron como un ajusticiamiento.
Extraoficialmente se conoció que el occiso fue identificado como Alejandro Moisés Rojas Muñoz, de 25 años de edad. El suceso ocurrió en la carrera 6 del sector 25 de Mayo I, en el municipio Simón Rodríguez, aproximadamente a las 2:30 de la tarde.
Testigos del suceso contaron que Rojas se encontraba dentro de un rancho visitando a su novia, cuando llegó una comisión de Polianzoátegui y obligó a salir de la residencia a la muchacha, su abuela, prima y un niño.
Estas personas relataron que los uniformados se quedaron dentro de la estructura de zinc con Alejandro y luego escucharon varias detonaciones. Aseguraron que el muchacho no estaba armado.
La abuela de la novia del abatido dijo que los funcionarios también se llevaron vajillas, copas, vasos, un freidor de papas, una cesta de meter ropa sucia y otras cosas que el muchacho les había pedido que le guardaran porque se iba a mudar a Barcelona.
La señora aseguró que su nieta apenas tenía un mes de noviazgo con el joven, a quien conoció en un local nocturno ubicado en la avenida Francisco de Miranda. Fuentes policiales mencionaron que el abatido es fugado de Polibolívar.
