A poco más de un año de haberse dado el resuelto el caso de Verónika Corona (16), cuya desaparición y luego asesinato confirmado a manos de Javier Barreto, que causó tensión por mensajes de presuntos secuestros y luego conmoción por el desenlace de los hechos, es un pesar en el plano judicial para la familia sobreviviente de la joven.

Zoraida Lara y Yovanny Corona, padres de la jovencita asesinada, acudieron al Palacio de Justicia para denunciar y pedir respuestas por la desaparición de los expedientes del caso de su hija.

Lara dijo que la última persona en acceder a esos archivos es la abogada defensora del imputado Javier Barreto, Arelis Jiménez. Alegó que en la lista de retiros y recepciones de archivos, la jurista no regresó los expedientes.

Lara denunció que hay demasiada protección para con Barreto, pues fue trasladado a un retén en Cumaná, estado Sucre, cuando debía estar en Puente Ayala, y el primo del feminicida, Jonathan Quijada, sigue prófugo.

Por los momentos, el expediente tiene un respaldo digital incompleto y corto, y se está buscando en los vagones del tribunal el archivo total.