Luego de que los avances de efectivo se convirtieran en una importante actividad en el sector comercial del estado Anzoátegui, hoy en día, desaparecieron casi en su totalidad.  Después de las restricciones  impuestas en el país, los comerciantes retiraron el servicio que les dejaba hasta un 15% de ganancia.

El comericante Carlos Valdez, señaló que en el 2016, los avances de efectivo representaron una entrada adicional de ingresos. «Comenzamos cobrando un 5%, pero a finales de octubre llegamos a pedir un 12% y la gente hacía largas filas para sacar dinero. No es secreto que los cajeros nunca tienen plata», alegó Valdez.

Añadió que luego de la amenaza recibida por la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde), decidió eliminar el servicio.  Valdez indicó que para el sector comercial también significaba una manera segura de salir del efectivo y protegerse de algún robo.

Impresiones
Abastos, establecimientos asiáticos, farmacias, panaderías y centros de llamadas eran los principales sitios que ofrecían este servicio y a donde la gente más acudía.  Actualmente, solo los locales establecidos, como Farmatodo y Locatel, pueden prestar el servicio de cajero automático.

Usuarios consultados manifestaron que son pocas las veces que logran realizar adelanto monetario en alguno de estos lugares impuestos, debido a la escasez en general de papel moneda.
«He venido como cinco veces a Farmatodo a buscar efectivo y nunca tienen. Cuando tienen, la cola es de más de dos horas. No es un servicio eficiente», señaló el ingeniero Gregorio Salazar.

Por su parte, la usuaria Mariela Canache, comentó que luego de dos meses aún sigue sin poder realizar avance de efectivo.  Comentó que desde que prohibieron la actividad en cualquier establecimiento, se ha visto en la necesidad de realizar largas colas  en los cajeros de Barcelona y Puerto La Cruz, para adquirir efectivo.