Más de 250 establecimientos que expenden licores en Anzoátegui han cerrado debido a las bajas ventas de sus productos.

La Cámara de Licoreros del estado (Calicor), informó que los constantes aumentos tanto del salario mínimo como de los rubros, no han permitido a los dueños de las licorerías estabilizarse.

Asimismo, aseguraron que la mayoría ha quebrado por no obtener ingresos suficientes para reponer inventarios ni para seguir pagando personal.

José Rodríguez, director general de Calicor, indicó que 250 millones de bolívares son invertidos en cajas de cervezas porque es el producto con más incremento, ya que el costo de estas sube entre 15% y 20 % al mes.

De igual manera, aseveró que la situación es preocupante, puesto que los locales que continúan trabajando registraron una caída del 80% en sus ventas, porque sus clientes no pueden costear las bebidas alcohólicas.

 

María Fernanda Velderrey