El oriental ha tenido, desde siempre, la costumbre de compartir con los vecinos cercanos a su hogar o urbanización.
El lugar recurrente para estas reuniones son las plazas públicas, ya que funcionan como zonas de encuentro comunal.
Pero esta tradición se ha ido perdiendo, al menos en el municipio Juan Antonio Sotillo, en donde los residentes comentaron que anteriormente jugaban dominó o cartas en estos espacios.
¿La razón de la pérdida de estas actividades? la falta de iluminación, mantenimiento y altos niveles de inseguridad.
Según el señor Arturo Sánchez, quien reside en el sector de Las Delicias, indicó que ahora permanecen en sus hogares y aquello de sentarse a conversar en los bancos de las plazas quedó en el olvido.
«Es un peligro salir de noche, más todavía sentarse en la calle. Extrañamos eso, por lo que pedimos reparen los postes de luz o coloquen nuevos bombillos», dijo Sánchez, agregando que quieren mayor presencia policial.
Recorrido
En un trayecto realizado por el equipo reporteril de Nueva Prensa de Oriente, se pudo observar que muchos de estos lugares se encuentran descuidados y en cada una de las comunidades en donde se ubican, la preocupación de los vecinos en general es el de la iluminación, ya que esperan recuperar el uso de los mismos.
En Pozuelos están dos, en donde no han sembrado árboles desde hace mucho, así como la de las Charas, Chuparín Arriba, Las Delicias, en donde están la Plaza La Crítica y Manuelita Saenz.
Además dos del sector de Guanire, una de Chuparín abajo y otra de Barrio Mariño.
«Necesitamos que hagan desmalezamiento, que pinten los brocales y construyan más parques para los niños», manifestó la ama de casa, Karina Arévalo, quien agregó que en estos espacios muchas veces los indigentes se observan durmiendo debajo de las estatuas o haciendo de los bancos sus hogares.
