La selección de Japón cumplió con las expectativas creadas previas a la competencia y derrotó sin mayores contratiempos siete carreras por una, a sus similares de China en el cierre del grupo B, correspondiente al Clásico Mundial de Béisbol.

La ofensiva nipona sigue enseñando su potencial y sacudió un total de ocho inatrapables, con dos cuadrangulares, para anotar las siete rayitas que inclinaron la balanza en el destino del encuentro.
Nuevamente Sho Nakata fue el principal bastión en Japón, remolcando dos carreras, sacudiendo su segundo vuelacercas del torneo y anotando otra rayita en el marcador. El campocorto Kosuke Tanaka también aportó de gran manera, agregando dos indiscutibles y pisando el plato en dos oportunidades.

La victoria quedó en manos del abridor Shota Takeda, que al lanzar cuatro episodios y permitir una sola anotación, le dio todas las facilidades a su equipo para que concretara una victoria que les permite asegurar el primer lugar del grupo.