Las estrías son marcas causadas por el estiramiento de la piel. Las fibras elásticas ubicadas bajo la superficie de la piel “se rompen” y se ven a simple vista.

Una vez aparecen, no es posible eliminar las estrías por completo ya que la piel está dañada, aunque se pueden reducir o hacer menos notorias.

A continuación te dejamos diez remedios caseros que te pueden ayudar a reducir las estrías sin necesidad de recurrir a las cirugías.

  1. Aceite de rosa mosqueta

Puedes aplicar unas gotas de este aceite directamente sobre las estrías, o bien añadirlo a la crema hidratante corporal que soláis usar normalmente. Además, la rosa mosqueta también es muy útil para mejorar la apariencia de las cicatrices.

  1. Aceite de almendras dulces

Se trata de un aceite rico en vitamina E y que aporta gran elasticidad a nuestra piel, logrando mantenerla joven y flexible. También puede ser utilizado para masajes relajantes, en especial cuando estás embarazada.

  1. Zumo de limón

Se puede aplicar directamente sobre las estrías y cicatrices, sin necesidad de rebajarlo. Se cree que su alto contenido de vitamina C, puede ayudar a la piel en la producción de colágeno y, de esta manera, conseguir mejorar su apariencia, incluso en el caso de que ya tengamos estrías.

  1. Aceite de coco

Gracias a su propiedad calmante, puede ser utilizado como un aceite para dar masajes; pero también para la prevención y para el tratamiento de las estrías. Podéis utilizarlo en estado líquido durante el verano y en el estado sólido o cremoso en invierno. Simplemente dejad reposar el aceite durante unos minutos en un recipiente con agua caliente, para que resulte más fácil a lo hora de aplicarlo en los masajes.

  1. Manteca de karité

Es capaz de suavizar y mejorar la apariencia de la piel. Se puede aplicar todos los días después de bañarse o de ducharse, en los puntos críticos. Eso sí, previamente deberéis ablandarlo en pequeñas cantidades entre vuestros dedos.

  1. Gel de aloe vera

Además de ser utilizado para paliar las quemaduras solares, también es eficaz en el tratamiento de las estrías, gracias a sus altos niveles de vitaminas C y E. Solo será necesario que apliquéis un poco de este gel sobre las áreas afectadas cada mañana, tendréis que aseguraros de que ha sido bien absorbido por la piel.

  1. Aceite de caléndula

Este aceite ha de prepararse dejándolo reposar en un frasco, manteniéndolo en un lugar oscuro durante tres semanas. Por otro lado, serán necesarios 50 gramos de pétalos de esta flor, para mezclarlos con 250 mililitros de aceite de oliva. Pasados 21 días, deberéis filtrarlo y guardarlo en un frasco de vidrio oscuro, manteniéndolo alejado del calor y de la luz. De esta manera, ¡ya tenéis listo vuestro aceite caléndula! A continuación, deberéis aplicarlo diariamente a las zonas afectadas. También se puede comprar.

  1. Azúcar blanco

Podéis utilizarlo como un exfoliante para vuestra piel. Para ello, mezclad una cucharada de azúcar blanco con un poco de aceite de almendras y unas gotas de zumo de limón. A continuación, removed hasta que la mezcla se pueda aplicar sobre las estrías. Frotad suavemente dicha mezcla sobre vuestra piel durante unos 10 minutos cada día, antes de ducharos. Repetid esta rutina durante al menos un mes, con el fin de mitigar las imperfecciones.

  1. Aceite de linaza

Se trata de otro de los aceites que se consideran eficaces en la lucha contra las estrías, debido a su contenido de ácidos grasos omega 3, y por su capacidad para ayudar a la piel en la producción de colágeno. Es necesario que mantengáis este aceite en la nevera. Se puede utilizar como complemento alimenticio o, si lo preferís, como un aceite de masaje en las zonas críticas.

  1. Cola de caballo

El silicio es un regenerador natural, presente entre los componentes de la cola de caballo, una planta medicinal que es particularmente eficaz en el caso de las estrías. Para prepararlo, deberéis mezclar un litro de alcohol a 40° con 100 gramos de cola de caballo, dejándolo reposar durante un mes. A continuación, agregad de 8 a 10 gotas de jugo de limón para que se diluya en medio litro de agua. Con esta preparación, deberéis masajear el área afectada dos veces al día, con movimientos circulares.