Políticos de Europa reaccionaron aliviados con el resultado de las elecciones celebradas el miércoles en Holanda,  el cual  evitó el peligro de que la extrema derecha del populista Geert Wilders se convirtiera en la primera fuerza del país y en fuente de esperanza para otras agrupaciones afines en Europa. El presidente de Francia, François Mitterand, saludó el éxito del Partido Popular por la Libertad y la Democracia (VVD), del primer ministro Mark Rutte, calificándolo como una «clara victoria sobre el extremismo».

 

Agencias.