La fiscalía surcoreana solicitó la detención del vicepresidente de Samgung, Lee Jae-yong. Esto, tras ser interrogado como sospechoso por el caso de la «rasputina surcoreana». También se investiga a otras empresas como LG o Hyundai.
Hay que resaltar que Lee Jae-yong, de 48 años, tomó las riendas del conglomerado Samsung después de que su padre, Lee Kun-hee, sufriera un infarto en mayo de 2014, que aún lo mantiene hospitalizado y sin habla.
La orden de aprensión acusó a Lee Jae-yong de malversación y soborno por valor de 36 millones de dólares. Para que esta orden se lleve a cabo tiene que estar aprobada por el Tribunal, por otro lado el vicepresidente de Samsung tendrá que permanecer en el país mientras continúe la investigación.

 

 

 

El Universal