Al recorrer las calles de la zona norte del estado Anzoátegui se pueden apreciar personas que venden de formar descontrolada productos de diferentes tipos, como alimentos regulados o preparados, ropa, calzado, artículos usados entre otros, y que para muchos usuarios encuestados, ya forman parte de la imagen visual que ofrecen las vías de la entidad.

Aunque esto ha existido toda la vida, según el economista Gilberto Román, recientemente  se ha radicalizado, debido a la inflación de tres dígitos que muestra el país, y que por ende, supera el ingreso salarial.

Román explica que existen múltiples razones para que un individuo se dedique al comercio informal, algunas de ellas es el hecho de no pagar impuestos ante las leyes venezolanas y alquileres de locales, lo que termina perjudicando económicamente a los negocios registrados y al estado; otra causa es el desempleo.

“La escasez y el desempleo desencadenan que la mayoría de los venezolanos se dediquen a vender productos regulados o cualquier cosa en las calles. Pero eso no es conveniente porque el estado está dejando de recibir inmensas ganancias en impuestos. Esto el gobierno lo sabe y no le conviene, porque ya la situación se le salió de las manos”. El economista considera además, que algunos buhoneros abusan de las necesidades propias y ajenas, y que dicha conducta es un factor común entre todos los trabajadores informales.

Implicados
“Lo hago para vivir, llevo cinco años dedicandome a esto. Aunque anteriormente me iba mejor, ahorita me alcanza para sostenerme, y más aún cuando es difícil conseguir trabajo”, señaló la trabajadora informal, Danira Campos, quien además reconoce que para ella es más conveniente ser independiente que pertenecer a una nómina y depender de quince y último. Asimismo, el vendedor de perros calientes, Yolfred López, opina que dejó su empleo hace menos de un año, debido a que el mismo no le generaba ganancias. “Era una pérdida de tiempo, ahora estoy mejor”, aseveró.

Ventas ilegales
Algunos expendedores son denominados «bachaqueros», debido a que ofrecen artículos regulados a precios elevados.

Rosmary Aguirre G